jueves, 30 de septiembre de 2010

"VIENTO DE OTOÑO" de Carmen Gil

Silba entre los troncos
y escondido acecha
y espera un descuido

y te desmelena.

El viento de otoño,

que es muy juguetón,

le despeina el moño

a doña Asunción.

El viento, que vuela,

como lagartija

se mete y se cuela

por cualquier rendija.

A don Barrendero

le esparce las hojas.

Cubre el pueblo entero

de sábanas rojas.

Una vez al año

desnuda al manzano

Desviste al castaño

después del verano.

Roba los sombreros,

les da volteretas:

son volatineros

de las plazoletas.

Y al salir la luna

le canta al oído

canciones de cuna

a un niño dormido.

viernes, 24 de septiembre de 2010

"OTOÑO"




Ya bailan las cañas de este roble anciano,
ya bailan sus hojas la danza de antaño.
De liquen su traje, su capa de escarcha,
sombrero y tirantes: ¡canta, mirlo, canta!

jueves, 16 de septiembre de 2010

"LOS GATOS" de Liliana Cinetto


Tardes en calma,
siesta de gatos
sobre cojines
de musgo blando.
Tardes serenas,
se está nublando,
caen cuatro gotas,
corren los gatos.


A los gatos les gusta
subir al cielo
trepando una escalera
de caramelo.
Les gusta hacer cosquillas
a las estrellas

con los bigotes largos

y las orejas.
Les gusta hacerles bromas
a los ratones,
jugar a la rayuela,
pasear de noche
y cantarle a la luna

sus serenatas
hasta que los descubre
la madrugada.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

"LA BODA DE CAFÉ CON LECHE" de Zandra Montañés

Septiembre trae viento,
trae baile de hojas
y Zandra muy presta
nos anuncia una boda.


Doña Blanca Leche,
la de la nevera,
muy vitaminada
leche de primera,
se quiere casar
con hombre moreno,
de enorme prestigio
y de olor muy bueno.

Ha puesto un anuncio
dentro del mercado
buscando ese novio
que tanto ha soñado.
La llamaron muchos
buenos pretendientes
y, a ninguno quiso,
la muy exigente.

Vino en la mañana
el novio añorado,
un chico moreno,
negrito, tostado.
Los dos se casaron
dentro de un tazón
y café con leche
es la invitación.

Se vino a la boda
el pan orgulloso,
jugo de naranja
y un huevo curioso.
Se vistió de crema
Doña Mantequilla
y la mermelada
llevó su sombrilla.

Y en esta boda
de café con leche
se fueron juntando
todos, uno a uno,
en esa bandeja
de mi desayuno.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

"LA VACA DE HUMAHUACA" de Mª Elena Walsh

Nunca es tarde para nada,
nos lo dice este poema
o mejor dicho esta fábula,
que tiene su moraleja.


Había una vez una vaca
en la Quebrada de Humahuaca.


Como era muy vieja, muy vieja,
estaba sorda de una oreja.

Y a pesar de que era abuela,

un día quiso ir a la escuela.

Se puso unos zapatos rojos,

guantes de tul y un par de anteojos.

La vio la maestra asustada

y le dijo: “estas equivocada”.

La vaca, vestida de blanco,

se acomodó en el primer banco.

Los chicos le tiraban tiza

y no podían más de risa.

Y como el bochinche aumentaba,

en la escuela nadie estudiaba.

La vaca, de pie, en un rincón,

rumiaba sola la lección.

Un día todos los chicos

se convirtieron en borricos.

Y en ese lugar de Humahuaca

la única sabia fue la vaca.